domingo, 15 de abril de 2012

Cobardía

Suena el despertador, las 7:00 a.m. Y se despierta, se mira las manos, despacio… Manos duras, curtidas de años de trabajo intenso en las obras… “Otro día más” susurra; como todos los días, café, unas tostadas, el traje, las llaves del 307 y a trabajar.
En general, la vida le sonríe, 30 años, toda la vida por delante, un buen trabajo. No es millonario, pero puede permitirse un capricho de vez en cuando.
Llegar al trabajo, saludar al jefe y compañeros, bata y a trabajar, mil y una muestras, cultivos… Y todos para él, no hay nadie más, ni tiempo para hablar. Uno tras otro los va haciendo despacio, procurando no cometer ningún error.
Salimos del trabajo, cogemos el coche, ducha rápida y se va a tomarse algo “Es viernes” Piensa, y mañana descansa.
Al bar de siempre, un tercio en su mano y unos frutos secos, comentando con el camarero los triunfos del deporte de moda. De repente se abre la puerta, y es ella…
Tú sabes quién es, pero ella no recordará ni tu cara, aunque se para un segundo… ¿La recuerda? Es posible, “es de lo único que me arrepiento, no debí de hacerlo” Una reflexión de alguien que despierta el amor de una mujer, para luego jugar con ella… La mayor cobardía de un hombre es despertar el amor de una mujer sin tener la intención de amarla… Algo que siempre lamentará, pero que no tiene solución… ¿Me acerco y me disculpo? No no, no tengo valor para ni siquiera mirarle a los ojos…
Si yo hubiera, escogido estar con ella… O no provocar que me quisiera… O no haberme presentado esa tarde… ¿Qué sería de mi vida? Sería igual, distinta quizá, millonario, vagabundo… Tantas posibilidades y nunca las sabré…
Ese día marcó un antes y después en su vida, decidió no volver a hacer daño a nadie… No quiere volver a ser uno de esos chicos, uno de tantos… Que juegan con los sentimientos… Podrán jugar mil y una veces con los míos, pero… Aunque cierre puertas y ventanas, no volveré, a ser tan cobarde en mi vida…

domingo, 26 de febrero de 2012

Principe Azul

El final del cuento de hadas... Lo di todo, todo... No me guardé nada para mi, con la esperanza de que un día pudiera corresponderme.
Enamorada de otro, en apenas 3 semanas... Golpe duro para mi, aún así, le digo que sea feliz.
Pero, en vez de no hacérmelo más dificil, pide amistad y además, pide que no la aparte de mi vida.


Y... En pocos días, pone una foto suya con él...Vivan los sentimientos.


<<Y así, es como los príncipes azules destiñen>>

martes, 14 de febrero de 2012

Una vez más

Porque soy idiota,
Porque he vuelto a caer,
Porque creo que puedo cambiar las cosas,
Porque lo doy todo desde el principio,
Por todo eso y más
Pido un cambio

Quiero ser tan frío como el hielo,
Ver una rosa como una simple flor,
Ver un atardecer sin sentir calor en mi interior;
Llamar a la puerta de mi corazón y que no conteste nadie,
Ser capaz de atravesarme el pecho sin pestañear y
No volver a llorar
… Poder dominar mi vida.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Expresarnos

    ¿Por qué nos cuesta expresarnos? ¿Tan duro es el mundo que tememos qué piensan de nosotros?
Es inevitable tener enemigos, pero no por ello debemos de ser un muro. El temor, ese sentimiento de autoconservación es clave; nadie quiere sufrir, ni poner en manos de otro un arma que puede usar en tu contra.

    Pero ¿es mejor ser un bloque, que no salga de ti nada, y que te quedes reducido a ser frío, pensante? ¿Sin corazón y con el tiempo, insensible?

    Yo, al menos pienso que no, expresarnos nos ayuda, buscar apoyos para mantener nuestra carga… Gente de confianza (cierto, cada vez menos), la cual no te utiliza como medio, sino como fin en ti mismo. Tú, yo y mi vecino por poner un ejemplo somos distintos, distintas vidas y situaciones que nos han llevado al hoy. Pero todos tenemos algo en común, y es esa “carga” (no su contenido, sino ella en sí misma) que a veces nos es demasiado pesada.



    Dicen, que “expresar nuestros sentimientos es signo de debilidad”, pero yo digo, que expresarlos es signo de valentía. Hace falta tener mucho valor, para abrirse completamente ante alguien.

    Eso sí, escoge. NO SEAS TONTO, se puede ser valiente pero no temerario. Ya que como decía Aristóteles “ningún extremo es bueno” (o algo parecido) xD

Referencia de imagen: <http://davidcortespv.blogspot.com> [Consulta: 19/11/11]

miércoles, 16 de noviembre de 2011

La hipocresía

    Yo no sé vosotros, pero me canso de tanta gente hipócrita, ya nadie actúa en consecuencia a lo que busca, sino, que lo queremos todo sin poner nada. Por eso, me he animado a escribir estos humildes versos que salen de una tarde algo complicada.



Oh, hipocresía, cuántos años llevas con nosotros ya.
Aunque quién lo diría, pues yo te veo con la misma fuerza.

Gente que pide mucho,
gente que se queja de lo que hay a su alrededor,
que defiende ideales o acciones que ni ellos cumplen...
Has enseñado bien a tus discípulos mi querida amiga.

Pero vigila tu espalda; ellos son tus alumnos y como tales
saben mentir, engañar... Pueden parecer débiles y por eso
les distes tus conocimientos pero saben dónde golpear.

Ni tú, Hipocresía, te libras de la acción de sus comentarios,
ni por un rumor que difundan, el cual acabará con tu imagen de dura y fuerte.

Nadie, está a salvo de tus enseñanzas... Ni siquiera tú


Referencia de la imagen: < http://sersaldelatierra.blogspot.com > [Consulta: 16/11/11]

martes, 15 de noviembre de 2011

De como consiguen algunos la libertad

    ¿De verdad te sientes libre, vivo? ¿Puedes ser tú sin problemas? Expresarte, moverte…
    En este mundo de locos (no estoy diciendo que yo no lo sea, de hecho, creo que soy uno de los que más lo son) cada uno tenemos nuestro refugio, unos comen, otros salen de fiesta, otros escriben, otros se guardan todo para sí… ¿Cuál es tu forma?
    Os enseñaré la mía, de la cual estoy particularmente orgulloso. Esta forma estuvo delante de mí toda la vida, la ignoraba, hasta que me atreví y aprecié su verdadero valor… Correr.



    Comenzamos a correr, damos el primer paso, el más difícil siempre. Tu sistema nervioso recibe miles de impulsos y da los  mismos…
   Cambio hormonal, impulso de adrenalina y testosterona… Alerta, capaz de ver más allá de nuestro horizonte, de pensar rápido, adaptarte.
     Tu corazón se acelera, cada vez golpea más fuerte, eres capaz de sentir cada movimiento de tu sangre.
    Te sube la temperatura, un agradable calor te invade, te sientes con fuerzas de seguir… Nada te detiene, obedeces tu propia voz, hoy mandas tú.
   Respirar, aumentamos la frecuencia, más y más litros entran a tu cuerpo… Te llenan con rapidez alcanzando cada centímetro de nuestro cuerpo.

    Avanzamos, ya te has regulado, pulso y respiración se acompañan durante el transcurso de los minutos, las endorfinas comienzan a actuar… Te dejas llevar por la sensación, no saber muy bien porqué pero simplemente… Quieres más, y no es suficiente con la dosis que recibes.

    Como buen adicto, buscas más… Nuevo salto. Pulso, respiración y regulación. ¿Tienes suficiente? Nuevo salto. Pulso, respiración y regulación. Aumentamos la dosis, pero no es suficiente ¿Esto se ha acabado? No. Aún puedes aumentarla hasta el límite.


    Acelera, echa el resto. No hay regulación posible. Tu sudor se mezcla con un cansancio; Un pequeño cosquilleo en tus piernas, Crees que vuelas, tu corazón parece que se va a salir de tu pecho, no sientes nada salvo el aire. ¿Sabes ya donde soy libre?

     En esos segundos donde soy yo y la carretera. En esos segundos, donde no pienso, donde echo el resto, donde mi cuerpo no me responde, donde nadie me sigue y el viento me golpea la cara… Donde no hay nada más, soy libre.